lunes, 4 de enero de 2016

Día 6 - Barrio judío

-8 y nevando, así hemos estado hoy. La verdad es que teníamos ganas de que nos nevara, para poder disfrutar de una bonita estampa de la ciudad cubierta por ese manto blanco. Desde las 10 de la mañana lo ha estado haciendo con mayor o menor intensidad, pero dadas las bajas temperaturas, ha cuajado de inmediato. No ha sido la súper nevada, pero ha estado bien.

Hoy no nos hemos salido del barrio judio. Aunque llevamos días paseando entre sus calles, comiendo en sus restaurantes... nos faltaba recorrerlo con orden y pausa, entendiendo su historia y entrando a conocer sus edificios más simbólicos.
La comunidad judía húngara fue tras la polaca la más extensa de Europa. Por ello, fue tan bien la que más ha sufrido a lo largo de los años masacres y humillaciones. Esta zona que llamamos barrio judio, fue en realidad el ghetto donde los alemanes decidieron encerrar a aquellos judios que no mataron o enviaron a los campos de concentración. Una pequeña zona de la ciudad, amurallada en sus orígenes, de la que no se les permitía salir. La historia ha sido muy cruel con ellos.

Actualmente es una zona repleta de edificios en mal estado, desconchados, abandonados... que se mezclan con otros restaurados o totalmente renovados. Lo que no se puede negar es el encanto de estas estrechas calles, repletas de vida, de ambiente, en el que se mezclan las culturas, las familias judias con los jóvenes que acuden a los locales (bares de ruina) en busca de diversión. Los supermercados con las tiendas kosher, las iglesias con las sinagogas. Y por todo esto es por lo que tanto nos ha gustado la visita de hoy (y no solo por la nevada!)

Hemos visitado la Gran Sinagoga, la segunda más grande en el mundo, solo superada por la de Nueva York. Desconocíamos la existencia dentro de la religión judia de un movimiento llamado Neolog, cuya doctrina pasa por buscar la integración con las comunidades donde se asientan. Es por esto, por lo que en el caso de esta sinagoga, resulta muy extraño las numerosas muestras de afinidad con la religión cristiana. Empezando por la estructura del templo, más parecido al de una iglesia, la existencia de un órgano en el interior o la de un cementerio en su exterior. Son, en definitiva, símbolos de ese movimiento Neolog del que os hablábamos. Muchas referencias al holocausto, a los muertos, a aquellas personas que salvaron muchas vidas poniendo en peligro las suyas. A todos ellos se les recuerda con una escultura, una lápida...

Nada más salir, la nieve estaba arreciando y la postal era de lo más bucólica.
Hemos seguido callejeando, sin parar de mirar los distintos edificios, intentando recordar cómo sería la vida de quienes allí vivieron hace años. Pequeñas plazas, murales, calles estrechas y en ocasiones desiertas, otras sinagogas... Un paseo sobre la nieve muy bonito y tranquilo. Y a -8 de temperatura, aunque uno ya se va acostumbrando !

Para que no falte el toque gastronómico del día... tras el café en uno de los sitios concurridos de la zona, y la comida, hemos disfrutado de un flodni, el postre judio por excelencia. Qué delicia (avellanas, mazapán, semillas de amapolas...)
Hoy la cena ha sido casera, tranquilamente en el apartamento, eso sí, con delicatessen locales.
Mañana más. Gracias por seguirnos.

1 comentario:

  1. Da gusto veros disfrutar de las maravillas de Budapest, y Susana casi no parece Susana tan aterida de frío.
    Besos castreños

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